
Las dos primeras películas las estrenaron prácticamente en el mismo año y dos años después llega la tercera entrega de “El corredor del laberinto: La cura mortal”.
Fuimos a ver esta tercera y última entrega para poder contaros con pelos y señales lo que os vais a encontrar este mismo fin de semana en las salas de toda España en las que se estrena la estresante aventura de Thomas y sus amigos.
Por cierto que tercera y última si hacemos caso a los libros en los que se basa la historia aunque no sé, esa mirada final del protagonista, ese horizonte, esa posibilidad en su mano… a mi estas cosas me hacen pensar ¿y por qué no? Ya me entendéis.
Como os decía, de los libros de acción y ciencia ficción escritos por James Dashner han salido estas tres películas sobre virus, enfermos y adolescentes que tienen que salvar a la humanidad que eso a esa edad es mucho salvar.
Vuelve a estar dirigida por Wes Ball y esta es sin duda un alarde de tecnología al servicio de la acción. Yo creo que
se nota lo que ha evolucionado la industria del cine en estos dos años que separan a las dos primeras de esta tercera entrega.
Dylan O’Brien vuelve a ser Thomas, el héroe de la historia, Kaya Scodelario es la incomprendida Teresa, Thomas
Brodie-Sangster se mete en la piel de Newt, Giancarlo Esposito es el bueno de Jorge, Will Poulter regresa como Gally y Ki Hong Lee es Minho, sobre el que pivota prácticamente toda la acción de la película.
La cura mortal

La cura mortal y el dilema moral, deberíamos añadir
porque puestos a ver la película podríamos ir un poco más allá ¿no?
¿Qué harías tú? ¿Sacrificarías a una persona por el bien de la humanidad? Porque quizás matar a una persona para salvar a miles puede ser sencillo pero ¿y torturarla? ¿Cuánto puede valer una sola vida humana? ¿Y si estás sacrificando a una buena persona y salvando a un asesino dentro de esa humanidad? ¿El fin justifica los medios?
¡Qué actual está de nuevo Maquiavelo después de ver “El corredor del laberinto»! ¡Y pensar que nuestros adolescentes cada vez tienen menos horas lectivas de filosofía en las aulas!
¡Qué pena que no les animemos a pensar en estos aspectos al ver películas como esta! Ya que no en clase de filosofía que lamentablemente no hay, cómo mínimo en clase de valores, una asignatura que se podría impartir utilizando series y películas como libro de texto de una forma espectacular.
Porque los dilemas son muy sanos a la edad del público al que se dirige la película aunque no sé si muchos de los asistentes irán un poco más allá de las peleas, las escaramuzas, los secuestros, los rescates, los disparos, las lealtades, las traiciones y los apuñalamientos (físicos y metafóricos).
Por cierto, ideal para ir a ver con adolescentes pero no con niños por muy mayores que se crean o que vosotros los veais. El equipo de maquillaje de la película vuelve a esmerarse con “los raros” y no creo que a los niños les gusten especialmente sus apariciones por sorpresa.
Sí, es una película de acción de hecho el protagonista, Dylan O’Brien, ha tenido distintos accidentes y lesiones durante el rodaje. Uno de ellos le llevó al hospital incluso y le tuvo sin poder seguir rodando durante más de un mes.
No me extraña que después de eso, Dylan llore tan bien delante de la cámara.
Sí, es una película de “sustos” más que de terror. Además hay momentos en los que es evidente que te vas a asustar pero si eres como yo no hay problema: te asustarás… ¡no aprendo nunca, oye!
Sí, es una película de ciencia ficción en la que la vida se limita a seguir vivos mientras un grupo de científicos
buscan una cura a un extraño virus que está diezmando a la humanidad.

Y sí, hay personajes y momentos de la historia que no termino de entender del todo, que se me caen un poco de la supuesta realidad que me quieren contar.
Hay personajes que aparecen y desaparecen como un suspiro, que prometían mucho más de lo que después son y que no aportan nada especial a la historia.
En general: entretenida y si vais a verla con los adolescentes que tenéis en casa y después les habláis de
Maquiavelo ¡entonces ya es perfecta!
Ostras ¿hay tres? sólo he visto la primera ¿dónde he estado?
Jajajaja.. ¿siendo padre? ;-))
Pues yo pensaba que era una de acción al uso, pero si dices que tiene un mensaje que vale la pena y te hace pensar me la apunto para verla… sin niños, of course
Si que los tuyos lo mismo son un poco pequeños aún.. jejeje