
No, la película de hoy no es para ir a verla con los niños pero sí habla de una familia muy peculiar.
Es para escaparnos los adultos y angustiarnos con “Todo el dinero del mundo” y salir del cine comentando que ni siquiera con eso, con todo el dinero del mundo, se asegura nadie la felicidad.
Hablamos de la película y de la historia en la que se basa y la que surgió por sorpresa en el set de rodaje, porque la vida da muchas vueltas y muchas sorpresas a veces.
Dirigida por Ridley Scott, Todo el dinero del mundo se estrena este próximo viernes en España y quizás sea una
buena excusa para salir al cine sin niños. Una escapada de adultos puede ser un plan estupendo.
El guion de la historia de David Scarpa recupera los momentos que vivió la familia Getty, una de las más ricas del mundo, en 1973, cuando secuestraron en Italia a John Paul Getty III uno de los herederos de este imperio mundial.
La tensión tiene que ser de esas que se mascan según empieza la película y más teniendo en cuenta que estamos ante una historia real.
La ficción la marca la realidad

ella lo rechazó. Después fue Natalie Portman la que también rechazó el papel y finalmente Michelle Williams ha sido la que ha dado vida a esta mujer al borde de la desesperación en cada uno de los 132 minutos que dura el metraje.
Kevin Spacey quien lo aceptó aunque finalmente no sea él quien aparece en la película sino Christopher Plummer.
Todos y cada uno de los planos en los que Spacey aparecía, se rodaron de nuevo por Christopher Plummer.
Jean Paul Getty tenía 80 años cuando secuestraron a su nieto, Plummer tiene 88 cuando ha rodado Todo el dinero del mundo, la labor de maquillaje ha sido mínima, por el contrario con Kevin Spacey fueron largas sesiones de maquillaje las que se necesitaron para acercar los 58
años de Spacey a los 80 de la persona real.
Pero todo pasó a un segundo plano cuando se descubrieron y se reconocieron los abusos realizados por Spacey a lo largo de su carrera profesional.

que volver al set de rodaje en Roma para participar en algunas de estas secuencias, la decisión estaba tomada y no había vuelta atrás ni por Scott ni por la productora.
Spacey para que no le influyera en su forma de afrontar al personaje.
que como actores tengan una calidad peor ni muchísimo menos.

Pues tiene buena pinta, pero chica creo que es una película de sufrir mucho, y no me apetece nada sufrir en el cine…
Aunque quien sabe, lo mismo acabe picándome por las interpinterpreta ..