
Visibilizar, estamos en esto desde hace años así que el Día de las Escritoras seguimos poniendo el foco en las mujeres que escriben porque aún la cosa no es que sea del todo paritaria.
No, en esto tampoco así que ayer se conmemoraba el Día de las Escritoras y hoy me hago eco de ello también en este blog donde muchas veces hablamos de mujeres y otras tantas de grandes libros. Hoy de grandes libros escritos por magníficas mujeres.
Me encanta, sinceramente, que el Día de las Escritoras se haya convertido en una conmemoración mundial después de que se iniciara en nuestro país en el mes de octubre del año 2016 ¡qué bueno esto de ser pioneros en algo interesante por una vez!
Escritoras que viven de escribir
Porque han conseguido ser visibles, sin pseudónimos ni hombres que firmaran sus obras como ha pasado durante siglos.
Ana Caro
María de Zayas
Leonor de la Cueva
Sor Juana Inés de la Cruz
Mariana de Carvajal
Feliciana Enríquez de Guzmán
Santa Teresa de JesúsTodas son autoras de los Siglos de Oro. ¿Cuántas de ellas estaban en vuestros libros de texto? ¿Cuántas siguen sin aparecer como debieran?
— Nando López (@Nando_J) 5 de octubre de 2018
Escritoras que con sus trabajos ponen voz a las miles de mujeres lectoras que existen en nuestro país. Sólo hay que subir a un vagón de metro en hora punta para ver quien sujeta más un móvil, un periódico o un libro.
Desde 2016, se trata de recuperar alguna de esas autoras, esas mujeres que escribían sin que nadie lo supiera, por la pura necesidad de escribir.
En la Biblioteca Nacional se hace una lectura de algunos fragmentos representativos de algunas de sus obras, en colaboración con la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias.
Se trata de una reivindicación más que justa si tenemos en cuenta, por ejemplo, nuevos suplementos culturales que ven la luz en estos días dirigidos exclusivamente por hombres, en los que exclusivamente escriben hombres. Ante esa falta de igualdad, habrá que mantener conmemoraciones como esta.

Uno al mes lleno de escritoras
Poco a poco y desde que llevamos con la iniciativa del Uno Al Mes en el blog, han sido muchas las autoras que hemos ido leyendo.
Los primeros meses con un montón de amigas blogueras también, después os he ido comentando mis lecturas y cada año, más o menos la paridad estaba ahí.
Porque es fácil encontrar mujeres que escriban y es muy fácil para otra mujer enfatizar con sus personajes, con sus ideas, con sus angustias y con su forma de enfrentarse a ellas.
Porque hablando todos el mismo lenguaje, a veces no lo planteamos en los mismos términos.
Tuve la suerte de charlar virtualmente con una de estas autoras, Care Santos, tuvo el detalle de responder a mis preguntas y contarnos cómo se organiza, cómo se plantea el reto de la hoja en blanco.
Además, “Deseo de chocolate” fue uno de los libros que os comentaba en nuestro Uno al Mes. Tres momentos históricos, tres mujeres en torno a un único objeto que sirve como excusa para contar tres historias o quizás sólo una.

Hablar de mujeres que escriben en nuestro país y de visibilizar la labor de las escritoras entre los más jóvenes es hablar de Laura Gallego.
Una de las autoras que forman parte de los planes de lectura de los institutos de enseñanza secundaria y que sirve de ejemplo para esas pequeñas historias que surgen a veces a esa edad, la edad de la inocencia, de los sentimientos arrolladores, de la imaginación desbordante y el desconocimiento más absoluto de uno mismo.
Isabel Allende ha sido otra de las autoras con la que hemos sufrido y disfrutado a partes iguales en el blog con «El juego de Ripper», lo mismo que nos pasó con la mexicana Laura Esquivel y su «A Lupita le gustaba planchar».
Historias escritas por mujeres sí pero sobre todo historias protagonizadas por mujeres para bien o para mal, como la propia vida.
Y por supuesto, un clásico, un único libro que le valió uno de los premios más importantes del mundo a su autora Haper Leer, hablamos de «Matar a un ruiseñor» y de lo mucho que aprendes a cualquier edad con una lectura como esta.
Uno más de esos libros que quizás nuestros hijos no se lean nunca o quizás sí, en el fondo hay cosas como leer a autoras, que podemos enseñarles a disfrutar y a descubrir.