
Leyendas, magia y lugares por donde hace tiempo que no se aprecia la mano del hombre. Soria es mucho más que la España vaciada, Soria es la laguna negra, el cañón del río lobos y otros muchos lugares que recorrer, turismo de interior cargado de sorpresas ¿te vienes de ruta?
El turismo de interior tiene cada vez más que ofrecer y en entornos naturales como los que tiene Soria es una de las grandes promesas para los que buscamos algo más que los entornos masificados.
Ojo que para ser la España vaciada, el turismo de interior también tiene picos en los que hay más gente de la que nos gustaría encontrar pero en general es todo más llevadero y más tolerable.
Turismo de interior: Soria

Hoy os cuento lo mucho y bueno que vais a encontrar por Soria y eso que solo voy a hablaros de dos puntos concretos:
- empezamos por un paseo por el cañón del Río Lobos, visitando su famosa cueva, rodeando la conocida ermita templaria y llegando a las inmediaciones del puente de los siete ojos
- terminamos subiendo a la laguna negra y si nos animamos incluso a la cuerda del Urbión aunque eso lo dejamos para los más valientes o los más preparados
De la laguna negra ya os hablé hace ya algunos añitos, no es la primera vez que la visitamos y merece la pena todas las veces que subáis a verla porque siempre es diferente.
La diferencia de verla en primavera a visitarla en otoño, por ejemplo, es notable así que sí, siempre es un buen momento para disfrutar del turismo de interior por Soria e incluso dejarse llevar por algunas de sus más conocidas leyendas.
La de la laguna negra por ejemplo es de esas que hay que contar a grandes y pequeños a la luz de la lumbre y si no la conocéis siempre podéis acudir al clásico «El Monte de las Ánimas» de Gustavo Adolfo Bécquer, que más de uno hemos leído en nuestra época escolar ¿os acordáis?
El cañón del río lobos es el otro recorrido por el que nos gusta pasear cuando visitamos la zona y que siempre nos espera con los brazos abiertos.
Es llano, es cómodo, es sencillo para caminar a cualquier edad y si vais en silencio el escándalo que montan las ranas ignorando por completo al paseante discreto es digno de mención.

Para algunos adultos es sorprendente así que ni os cuento lo que resulta para los niños escuchar a montones de ranas que no van a ver y aún menos van a poder tocar.
Y por supuesto, cualquiera de estas dos rutas o de las muchas que podéis descubrir por la provincia, siempre llevan de la mano la gastronomía típica soriana con los famosísimos torreznos o como dicen en la zona «barritas energéticas» de Soria que son una delicia y que hacen que repongas fuerzas en cuestión de minutos.
Covaleda, Vinuesa, Almazán, Medinaceli son sólo algunos de los municipios en los que merece la pena detenerse y pasear, incluida la propia ciudad de Soria.
Recorrer las calles y sorprendernos con sus iglesias, las ermitas y por supuesto los envolventes pinares sorianos en los que respirar es un regalo.

Y si tenéis tiempo visitad Numancia para viajar al pasado más romano de esta provincia y de nuestro país en general.
Nosotros ya nos hemos apuntado a una próxima excursión por estas famosas ruinas que hablan de resistencia y libertad.
Curioso que vestigios del pasado estén tan actuales en el entorno de una región que resiste al olvido de las adminitraciones que trata de reinventarse como puede, en parte gracias al turismo de interior, y como le dejan.
Pero siempre manteniendo su libertad y aquello que la define, a ella y a sus lugareños incluso a los que han tenido que salir de Soria buscando nuevos caminos que recorrer.