
No, yo no. Bueno yo no quería pero tuve hijos y ellos sí, sobre todo uno de ellos, tenía claro prácticamente desde que aprendió a hablar que él quería un perro. Y nos ha terminado por convencer unos años más tarde pero ¿que significa tener un perro?
Tener un perro es una aventura a largo plazo, eso siempre hay que tenerlo en cuenta. Convivir con un perro tiene un coste económico nada despreciable y sí, es evidente que una vez que entra en tu casa, le quieres un montón pero hasta que entra es muy bueno hacer cuentas.
Tener un perro supone de media que nos gastemos en torno a los mil euros al año, unos cien euros al mes más o menos según la Real Sociedad Canina de España que de perros saben un rato.
Tener un perro es divertido y entrañable, lo complicado es cuidarlo como se merece porque es un ser vivo.


Tener un perro tiene un precio
Los gastos de alimentación, de veterinario, de higiene y peluquería (sí, hay perros que necesitan ir al peluquero varias veces al año y no es simplemente por una razón estética). Y además, pensemos en que alguna cosa, algo en casa es muy probable que se nos rompa gracias a la curiosidad de este nuevo miembro de la familia.
A esos gastos que podríamos definir como gastos básicos, podríamos tener que sumarles otros gastos adicionales relacionados con el adiestramiento y la educación o incluso en alguna ocasión, la residencia canina durante el tiempo que sea necesario.
Según la Real Sociedad Canina de España, todo estos gastos suben en torno a los 200 euros más al año que hay que sumar a los anteriores que hemos mencionado.

Que no, que no todo es dinero cuando queremos tener un perro en casa pero es evidente que el tema económico tiene un gran peso en esta convivencia. De hecho es el tercer motivo de abandono de animales de compañía: la incapacidad de asumir no todos estos gastos sino solo los más básicos.
Sí, kilos de paciencia y algunos euros extras al año son imprescindibles para tener un perro en casa y que todos seamos felices, incluido el propio animal.
Su alimentación, adaptada a sus características físicas y a la edad de desarrollo del animal, el «ajuar» inicial de correa, cama, comederos y ya puestos, el precio del propio animal si es que no nos animamos por adoptarlo.

La Real Sociedad Canina de España insiste en la importancia de hacer cuentas y echar números antes de embarcarnos en la aventura de tener un perro en casa y por supuesto, tengamos muy claro que debemos elegir un perro que se adapte a nuestro hogar a nuestra familia y a nuestro estilo de vida que en parte va a modificarse con la llegada de un animal a nuestra vida.
Es evidente que se trata de una decisión importante, tener un perro en casa es una decisión que debemos tomar juntos, todos los miembros de la familia y tenemos que asumir cambios y responsabilidades para que tener un perro nos haga más felices a todos, incluido al propio animal.