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Las cervecitas de más, los aperitivos, las tapas, las cenas a horas intempestivas, los desayunos copiosos, los helados de postre, merienda o cena. Está claro que nuestros hábitos alimenticios en vacaciones se relajan un poco, quizás un poco más de la cuenta y nos hemos traído unos kilos de más estas vacaciones. Y no sólo nosotros, según las estadísticas la mayoría de los españoles volvemos a casa de las vacaciones con dos kilos de más de media.
No hay problema ni agobios ¡vamos a quemarlos! Con cabeza y sentido común sobre todo. Volvemos a llenar nuestro plato con alimentos frescos con baja carga calórica, volvemos a comer con cabeza menos productos procesados y a poder ser ninguno ultraprocesado. Dejamos los helados de postre y los cambiamos por fruta fresca o yogures.
Volvemos a organizar los horarios de las comidas y las horas para descansar. Volvemos a llenar de agua nuestras copas con mucha más frecuencia en lugar de refrescos o bebidas con alcohol y volvemos a movernos poco a poco, cada vez un poco más.
Nos hemos traído unos kilos de más estas vacaciones y nos los vamos a quitar más que nada por nuestra salud, el resto es secundario.
Antes de irnos a comprar ropa de una talla más, vamos a tomar medidas pero de otro tipo. Hay un enorme abanico de posibilidades para movernos un poco más desde deportes a actividades físicas en el gimnasio o incluso actividades del día a día sin salir de casa.
El running según el análisis de la Harvard Medical School es la actividad física que más calorías quema aunque no es la más recomendable para todas las personas. La ventaja es que nos podemos poner el horario que queramos y marcar nosotras nuestros propios ritmos.
No se trata de salir a correr así sin más, no debemos olvidar que para correr necesitamos un poco de preparación. Hay un montón de libros y de webs que te van indicando como debes alternar los tiempos de caminata con los tiempos de carrera para ir avanzando sin prisa pero sin pausa.
El ciclismo es el segundo deporte que más calorías quema por tiempo practicado y no se trata solo de enfundarse el mallot y subirnos a la bicicleta, podemos elegir la bicicleta como vehículo prioritario en nuestro día a día.
Algunos tendrán la suerte de poder desplazarse a su trabajo en bicicleta, otros la podrán utilizar para realizar los recados habituales y así, casi sin darnos cuenta esos kilos de más los iremos perdiendo poco a poco.
Si no tenemos bicicleta tal vez nos podamos decantar por la natación que siendo otro de los deportes que más calorías quema por tiempo practicándolo, además es muy amable con nuestras articulaciones y la equipación es bastante más asequible que comprarnos una bicicleta, por ejemplo.
Si somos conscientes de que nos hemos traído unos kilos de más de las vacaciones pero además lo que queremos no es sólo quemar grasas sino soltar estrés por la vuelta a la rutina a lo mejor el boxeo o sus derivados es nuestro deporte.
Solía ser un deporte mayoritariamente masculino y muy acotado pero cada vez son más las personas que lo practican como una forma que les funciona a las mil maravillas para liberar endorfinas algo para muchos mucho más necesario que bajar esos kilos de más.
Además hay que sumar la eficacia del senderismo que aunque no sea la actividad con la que más calorías quememos por minuto sí es una actividad que podemos mantener en el tiempo con más facilidad. Las sesiones de caminar pueden ser más largas que las de correr, por ejemplo y podemos practicarlas varias veces a la semana para que nuestra salud mejore y la adherencia a la actividad se alargue.
Por opciones sensatas de actividades distintas para quemar la evidencia de que hemos traído unos kilos de más ¡que no sea!
