
Para evitar las dichosas e incómodas infecciones vaginales, toda precaución es poca y es bienvenida, por eso hoy nos detenemos un poquito en la forma más aconsejable de lavar nuestra ropa interior de cara a prevenir las infecciones vaginales que sufrimos las mujeres (¡obviamente!) a lo largo de nuestras vidas.
En Estados Unidos las infecciones vaginales son uno de los motivos más frecuentes de visita a la consulta, suponiendo millones de visitas anuales al médico.
Las infecciones vaginales están causadas por microorganismos, bacterias o levaduras. Suelen producir una secreción con prurito, enrojecimiento y a veces sensación de quemazón e incluso dolor.
Hay determinados factores que hacen más probable que se produzca una infección:
- cuando disminuye la acidez vaginal y desciende el número de bacterias protectoras que suelen vivir allí al mismo tiempo que aumenta el número de bacterias que provocan la infección.
- cuando existe una falta de higiene en la zona genital aumentan las probabilidades de infecciones bacterianas
- cuando usamos ropa interior ajustada y no absorbente porque este tipo de ropa atrapa y mantiene la humedad lo que favorece el crecimiento de bacterias y levaduras que provocan las infecciones vaginales
Para detectar los microorganismos que pueden ser causa de estas infecciones se examina una muestra de cuello uterino o de flujo vaginal y el tratamiento, como es lógico, va a depender de lo que la haya causado.
¿Cómo lavar la ropa interior para evitar infecciones vaginales?
La técnica de lavado de nuestra lencería tiene su importancia porque nuestra vagina es una zona extremadamente sensible y sus mucosas están muy expuestas a los agentes externos, por lo que son muy vulnerables alas infecciones.
La ropa interior según nos recomiendan las ginecólogas hay que lavarla a altas temperaturas. Si tienes algún tipo de alergia cutánea huye de los detergentes y jabones que tengan perfumes y evita todo lo que puedas el uso de suavizantes.
Para cerciorarnos de que no quede ningún rastro de jabón en nuestra lencería podemos usar un programa de doble aclarado en nuestra lavadora o hacerlo a mano porque es muy importante que no quede jabón en estas prendas.
La ropa en general pero la interior más especialmente debe guardarse en el cajón o en el armario cuando esté bien seca y para eso es recomendable dejar que se seque en zonas bien ventiladas. Con esto evitamos el crecimiento de hongos en los tejidos que no van a hacer nada bueno en nuestra piel.