
Parece mentira pero las cifras lo dejan clarísimo, lo de aprender un segundo idioma se nos hace bola a la mitad de los españoles y ya lo de aprender más de uno, directamente es una misión imposible a pesar de que cada vez se exige más en el mundo laboral. La mitad de los españoles no hablamos un segundo idioma, nada, cero, alguna palabra suelta pero hablar, lo que se dice hablar, ni de lejos.
Según los últimos datos que ha publicado Eurostat, más del 45% de los españoles de entre 25 y 64 no hablamos un segundo idioma y eso que nuestro país es el que tiene mayor número de escuelas internacionales (más de 270) y hay más de 1.400 escuelas de inglés. Pues ni por esas.
En el dominio del inglés estamos solo por encima de Italia de entre todos nuestros vecinos europeos o sea que somos los segundos que peor hablamos inglés en toda Europa y eso que los españoles destinamos de media unos 10 años a estudiar inglés. Lo estudiamos pero no, no lo hablamos.



Y es innegable que cada día es una necesidad mayor para muchas personas en su entorno laboral. Según datos de Zoom, en un año en esta plataforma se pueden organizar en torno a las 3.300 millones de videoconferencias con participantes en distintos países del mundo.
Un 47% de las empresas ven como pueden reducir sus costes gracias a la implementación de las reuniones o las visitas online pero claro, el problema viene cuando no todos los participantes hablan el mismo idioma y sobre todo cuando uno de ellos no habla inglés.
Un propósito de año nuevo para miles de personas, año tras año
Aprender inglés es uno de esos propósitos que pueden encontrarse en las listas de miles de españoles cada año, un año tras otro porque no es sencillo, no tenemos todo el tiempo ni el dinero que nos gustaría emplear para conseguirlo, no se enseña quizás como más nos serviría a cada uno de nosotros y puede que tampoco pongamos todo de nuestra parte porque a lo mejor no hemos caído en la cuenta de todas las herramientas que tenemos a nuestra disposición.
Es verdad que volviendo a los datos publicados, resulta que los españoles destinamos el doble de dinero que el resto de los habitantes del planeta en nuestro infructuoso empeño de aprender un segundo idioma. Algo no estamos haciendo bien a la vista de todos estos datos.
No se trata solo de dinero, en esto como en todo en la vida, según el Foreign Service Institute estadounidense, para aprender un idioma con una fluidez básica hay que invertir en torno a las 720 horas de estudio y práctica. Debe ser que no lo hacemos o no lo hacemos todo lo bien que deberíamos y eso hay que empezar a cambiarlo cuanto antes o lo de aprender un segundo idioma seguirá en nuestra lista de buenos propósitos por los siglos de los siglos.



¿Cómo conseguir aprender un segundo idioma de una vez por todas?
Obviamente estudiándolo y hablándolo, pero si fuera sencillo ya lo habríamos conseguido, así que conviene tener en cuenta algunos elementos que nos pueden ayudar a que este sea el año definitivo.
1º.- Vamos a una escuela que se ajuste a nuestras necesidades, a nuestros horarios, a nuestro nivel, a nuestra forma de entender y de aprender un idioma. Un centro en el que estemos cómodos para preguntar las dudas, para intervenir, para hablar en el idioma que estamos aprendiendo. Un centro en el que nos motivemos de verdad con esta actividad.
No hay una forma de enseñar mejor o peor, hay distintas formas porque hay distintos alumnos como hay distintos profesores y lo que puede funcionar con unos a lo mejor no es lo más adecuado para otros.
Lo importante no es que las clases sean online o presenciales o que las impartan nativos o profesores foráneos. Lo importante es que sean las que mejor se adaptan a ti como alumno y tengan una carga horaria suficiente como para que el contacto con la segunda lengua sea lo bastante frecuente.
2º.- Vamos a trabajar en casa con apps gratuitas como puede ser Duolingo, una de las más conocidas y de las más utilizadas en todo el mundo para aprender decenas de idiomas. Podemos organizarnos el horario para dedicar un tiempo tres veces por semana a trabajar a través de la app mediante los juegos, los cuentos, las historias en las que se desarrollan situaciones de la vida diaria pero sin dejar de lado la importancia que tiene la gramática cuando queremos aprender realmente un idioma.
3º.- Vamos a buscar una lectura en inglés, da igual qué tipo de lectura sea porque todo es válido para aprender la gramática dentro de un contexto. Es conveniente que la historia te interese para que el proceso sea más fluido y más entretenido aunque en cualquier caso no hay que desesperar, se trata de aprender un idioma y de trabajar el proceso desde distintos aspectos para que esta vez sí lo consigas.
4º.- Vamos a revisar alguna serie o película en versión original, alguna de las que ya has visto vuelve a verla de nuevo, esta vez en el idioma que estés empeñado en aprender. En inglés tienes material más que de sobra y si empiezas por ver un capítulo a la semana en versión original seguro que muy pronto te animas a ir viendo más. Se trata de aumentar tu exposición al idioma de una manera práctica y entretenida.
5º.- Vamos a buscar donde poder charlar en este nuevo idioma. Hay centros de estudios, bibliotecas o incluso cafeterías, donde se organizan grupos para hablar en un segundo idioma, seguro que cerca de tu casa o de tu trabajo tienes alguno de esos grupos. Puede ser una forma estupenda de trabajar la escucha y la expresión oral, de una manera distendida y eficaz al mismo tiempo.


